Los audífonos son dispositivos que pueden mejorar significativamente la calidad de vida de aquellas personas con pérdida auditiva. Sin embargo, no son una solución mágica. En algunas ocasiones, las personas que utilizan audífonos pueden experimentar dificultades para entender palabras. Este problema puede ser frustrante y limitante, y puede afectar a la vida social, laboral y educativa de las personas afectadas.
1. La comprensión del habla
El proceso de comprensión del habla es complejo y va más allá de la mera audición. Involucra procesamientos e interpretaciones de nivel superior.
Varios factores pueden influir en la calidad de esta comprensión, como el tiempo que lleva una persona sin tratar su pérdida auditiva y el grado de pérdida experimentado. Cuando se adaptan audífonos, la persona puede enfrentarse a sonidos que su cerebro ya no reconoce.
Es esencial comprender que oír y entender son dos cosas diferentes de la audición. Una persona puede escuchar sonidos perfectamente pero no comprenderlos. Esto se debe a que, con el tiempo, la pérdida auditiva hace que una persona pierda la familiaridad con ciertos sonidos.
1.1. Factores individuales en la pérdida auditiva
Hay tres componentes clave en la pérdida auditiva:
- La intensidad del sonido requerida para que los oídos lo detecten.
- La capacidad para entender las palabras una vez que se ajusta el volumen.
- La capacidad para entender las palabras con ruido de fondo.
Cada individuo tiene un perfil único en estos aspectos, lo que influye en su capacidad para interpretar palabras en diferentes contextos.
1.2. La importancia de las pruebas auditivas
Dos personas con una pérdida auditiva similar pueden tener experiencias muy diferentes en términos de cómo interpretan el habla.
La elección de un audífono no sólo debe basarse en un audiograma, sino también en cómo la persona escucha y comprende el habla en diferentes situaciones y entornos. Es crucial que el audífono no sólo amplifique el sonido, sino que también mejore la claridad del habla en situaciones tanto silenciosas como ruidosas.
1.3 Daño en el nervio auditivo
El daño en el nervio auditivo es una causa común de pérdida auditiva. Esta forma de daño puede resultar en una discriminación deficiente de palabras. Es decir, aunque uno pueda escuchar sonidos, discriminar palabras específicas puede ser un desafío.
Un audífono puede amplificar el sonido, pero no siempre mejora la discriminación de palabras en personas con este tipo de daño. Es importante usar estos aparatos cuanto antes, ya que retrasar su uso puede empeorar la discriminación de palabras con el tiempo.
2. Los límites de los audífonos
La tecnología en audífonos ha avanzado de manera espectacular, pero no curan el daño existente en nuestros oídos. Los audífonos no reparan las células ciliadas dañadas ni eliminan completamente la privación auditiva que puede ocurrir después de años de no tratar una pérdida auditiva.
Es como esperar caminar perfectamente después de haber estado en cama durante años, solo porque ahora tienes un andador. Los audífonos pueden amplificar el sonido, pero no solucionan el daño subyacente ni la atrofia cognitiva.
2.1. Factores técnicos y ambientales
Un audífono, por avanzado que sea, tiene sus limitaciones.
Las obstrucciones como la cera, las baterías agotadas o una adaptación inadecuada pueden afectar su rendimiento.
Los micrófonos en audífonos, por ejemplo, capturan sonidos más cercanos con más claridad. Esto significa que los sonidos distantes o de fondo pueden interferir con la audición deseada. Existen soluciones, como accesorios adicionales, que pueden ayudar a superar estas limitaciones.
Además, factores externos, como el entorno acústico y la manera en que las personas hablan, también juegan un papel crucial. Una persona que habla muy rápido, que no vocalice claramente o que esté en un ambiente ruidoso, puede ser difícil de entender, independientemente de la calidad del audífono.
3. La importancia de la rehabilitación auditiva
Más allá de la amplificación de los sonidos no audibles, muchos pacientes también luchan con la discriminación del habla. Es decir, aunque pueden escuchar sonidos, la capacidad cognitiva para interpretarlos puede haber disminuido.
Mientras que los audífonos pueden restaurar los sonidos perdidos de inmediato, el proceso de comprender esos sonidos lleva tiempo y a menudo requiere rehabilitación auditiva. Tener expectativas realistas y trabajar con un profesional adecuado es muy importante para lograr los mejores resultados.
4. Adaptación y paciencia
Es fundamental que los pacientes y su entorno se den tiempo para adaptarse a los audífonos y la rehabilitación. La mejora es un proceso gradual y requiere paciencia y persistencia.
Es esencial que tanto los pacientes como los familiares se involucren activamente en su rehabilitación auditiva y busquen el apoyo y la guía de profesionales experimentados para maximizar sus posibilidades de comprender el habla y mejorar su calidad de vida.
Julio Gómez Relinque
Audioprotesista con más de 8 años de experiencia en diferentes centros auditivos de España. Embajador 2020 Forward Thinking. Seleccionado para proyectos en GoLatam 2018. Actualmente Director de Audiología en Audifono.es