Aunque en general se suele confundir una cosa con la otra, las órtesis y las prótesis son productos totalmente diferentes. Estos dispositivos tienen diseños y funciones específicas.
Hay muchas razones por las que las personas pueden necesitar dispositivos de asistencia, como órtesis o prótesis. Si no conoces estos dispositivos, hay algunas cosas que debes saber, sobre todo la diferencia entre ambos.
La principal diferencia entre las órtesis y las prótesis es que mientras un dispositivo ortésico se utiliza para mejorar la extremidad de una persona, un dispositivo protésico se utiliza para sustituir una extremidad por completo.
1. ¿Para qué se utilizan las órtesis y las prótesis?
Ambas se suelen recetar a pacientes que sufren afecciones similares. Por ejemplo, las personas que padecen diabetes suelen requerir el uso de prótesis ortopédicas en algún momento de su vida debido a las complicaciones relacionadas con esta enfermedad.
Sin embargo, hay muchas ocasiones en las que, a pesar de los esfuerzos de la persona, es necesario amputar su pie y se le prescribe una prótesis. A continuación, te explicamos todo lo que necesitas saber para diferenciar las órtesis y las prótesis.
1.1. Órtesis
Las órtesis ayudan a los pacientes con dificultades a utilizar sus extremidades u otras partes del cuerpo. El objetivo principal de estos dispositivos es mejorar o corregir una parte del cuerpo que no funciona de forma correcta.
Las órtesis pueden resolver o aliviar problemas derivados de deformidades o deficiencias. Pueden reducir la tensión en determinadas partes del cuerpo y permitir que se curen sin hinchazón, molestias o inflamación.
Entre los ejemplos más comunes de aparatos ortopédicos se encuentran las órtesis de columna, que se utilizan en pacientes con problemas de columna y espalda causados por la escoliosis, y los aparatos ortopédicos para los pies, que suelen presentarse en forma de plantillas. También se consideran ortésicos varios tipos de corsés.
1.2. Prótesis
Lo más probable es que la gente piense en las prótesis cuando confunde los términos. Sin embargo, mientras que los aparatos ortopédicos pueden ayudar a una parte del cuerpo existente, las prótesis son sustituciones artificiales de partes del cuerpo que faltan.
Las extremidades artificiales son el tipo de prótesis más reconocido. Si una persona carece de una pierna, ya sea por una discapacidad congénita o una amputación, puede tener una prótesis en su lugar.
Las prótesis pueden ser más o menos complejas tecnológicamente. Los tipos más avanzados pueden proporcionar a los pacientes un alto nivel de funcionalidad de la extremidad, permitiéndoles realizar diversas acciones que de otro modo serían difíciles o imposibles. Este es el caso de los audífonos.
Los audífonos son prótesis auditivas que corrigen una deficiencia auditiva del usuario. Los audífonos amplifican los sonidos no audibles por el usuario.
2. Proceso de fabricación de productos ortopédicos y protésicos
Dependiendo de las necesidades individuales de cada paciente, las órtesis o prótesis se pueden fabricar a medida. La creación de un molde es la parte crucial de este proceso, y suele ser mucho más sencillo en el caso de las órtesis.
En el caso de las prótesis, suele ser necesario hacer un molde «negativo» de la extremidad que falta antes de hacer la variante «positiva» que se convertirá en el plano para fabricar el dispositivo. En ambos casos, se pueden crear moldes de forma manual o mecánica. Los recientes avances tecnológicos han hecho que este proceso sea mucho más preciso y rápido.
En el caso de los audífonos, se realiza a medida en los casos en los que el paciente necesite un molde para que el audífono se adapte a su canal auditivo.
Las órtesis o prótesis para diferentes pacientes pueden requerir distintos niveles de personalización para adaptarse a hábitos, actividades y estilos de vida concretos. Los profesionales sanitarios pueden ayudar al paciente a conseguir el diseño que mejor se adapte a él en ese sentido.
3. ¿Cuándo acudir a un profesional?
Las personas que sufren ciertas afecciones, como la pérdida auditiva, pueden consultar a un profesional para recibir información o consejos sobre qué debería hacer.
Si descubres que estás perdiendo la audición, debes ponerte en contacto con un audiólogo u otorrino para que te explique tus opciones. En el caso de la audición, si no se trata, puede empeorar a medida que pasa el tiempo. Lo más recomendable es ponerse en manos de un profesional cuanto antes.
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Alicia Ruiz
Especialista en comunicación social. Redactora para diferentes medios como EuropaPress, elDiario.es o El economista. Storytelling a contrarreloj y sacando creatividad de donde parecía imposible.