La discapacidad auditiva son todas aquellas alteraciones objetivas en la percepción de la audición. Es decir, se trata de una disminución o pérdida de la capacidad para oír por problemas en el aparato auditivo.
Según la Organización Mundial de la Salud, “la discapacidad auditiva (DA) es una pérdida auditiva superior a 25 dB, en la que se incluyen la hipoacusia, la sordera y la sordera profesional”.
Tipos de discapacidad auditiva
La discapacidad auditiva puede clasificarse según el momento en el que se ha originado o en función del tipo de pérdida auditiva que presente:
Según su origen puede ser:
Discapacidad auditiva neurosensorial: alteraciones en la percepción de sonido.
Discapacidad auditiva conductiva: problemas en la transmisión de los sonidos.
Discapacidad auditiva mixta: combinación de ambas discapacidades auditivas.
Grave: la pérdida auditiva se encuentra entre 71-90 dB.
Profunda: la pérdida auditiva supera los 90 dB.
Tratamiento de la discapacidad auditiva
Los tratamientos para la discapacidad auditiva dependen de la causa y el grado de severidad. Se pueden dividir en tratamientos médicos o quirúrgicos y audífonos.
En cuanto a los audífonos, ayudan a muchas personas a escuchar y mejorar la comunicación sin necesidad de intervenciones quirúrgicas.