Cómo comunicarse con un mayor con hipoacusia

La última actualización se ha realizado el 04/03/2022. El artículo ha sido revisado por Sheila González.

En la actualidad, 430 millones de personas se ven afectadas en su día a día por la pérdida auditiva. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), para 2050 esta cifra podrá superar los 700 millones de personas. En este porcentaje se encuentran las personas mayores con hipoacusia, uno de los colectivos más olvidados.

Es cierto que puede las personas mayores con pérdida auditiva pueden mostrar dificultades para comunicarse, pero con apoyo y las ayudas técnicas adecuadas pueden integrarse en un grupo y participar de forma activa en una conversación.

En este post, miResi explica qué es la hipoacusia en la vejez, cómo se puede prevenir y cuál es la mejor manera de comunicarse con un mayor con hipoacusia. 

1. La sordera en la vejez

La hipoacusia en la vez aparece como una pérdida progresiva de la audición. Esto se produce cuando las células pilosas que están dentro del oído se dañan o mueren. Estas células son las responsables de recoger las ondas sonoras y convertirlas en señales nerviosas para que el cerebro pueda interpretarlas. Al morir las células pilosas, no se regeneran de nuevo. Esto es lo que provoca la pérdida auditiva.

Según el Instituto Nacional de la Sordera y Otros Trastornos de la Comunicación (NIDCD) por sus siglas en inglés), la causa principal de la hipoacusia en el anciano es el propio envejecimiento. No obstante, existen otros factores que pueden contribuir a la pérdida de la audición. 

Por ejemplo, las exposiciones al ruido de manera continuada, afectan de manera directa a la audición. El ruido fuerte puede dañar las células del oído del mismo modo que el envejecimiento, lo que hace que se produzca pérdida auditiva.

Del mismo modo, la presión arterial alta o la diabetes, así como medicamentos ototóxicos pueden hacer que se pierdan capacidades auditivas.

La hipoacusia en el adulto mayor puede ser difícil de identificar. Los signos más comunes de hipoacusia en ancianos pueden ser no comprender palabras, frases o conversaciones, incluso si aún conservan capacidades auditivas.

Además, las personas que empiezan a perder capacidad de audición se pueden volver más sensibles a los sonidos agudos, lo que provoca directamente cambios en su comportamiento. Por tanto, la mejor manera de tratar la hipoacusia en los ancianos es a través de la prevención.

2. ¿Se puede prevenir la hipoacusia en el anciano?

Aunque existen factores genéticos que pueden llevarnos a padecer sordera, la hipoacusia en el adulto mayor puede evitarse a través de diferentes estrategias y cuidados. Cuando antes se tomen medidas, más se podrá retrasar su aparición.

Algunos consejos clave para la prevención de la hipoacusia son: 

• Evitar fármacos que puedan provocar daños y pérdidas de audición. 
• Evitar el tabaquismo, y tratar de llevar una vida sana y equilibrada. 
• Realizarse revisiones periódicas en el centro auditivo para comprobar la salud auditiva. 
• Evitar el uso de auriculares y el volumen alto. 
• Evitar los bastoncillos en el limpiado de los oídos. 
• No sobreexponerse a ruidos fuertes o agudos. 
• Conocer si existen antecedentes de hipoacusia en la familia. 
• No usar prótesis auditivas sin diagnóstico profesional. 
• Evitar la entrada de agua en el oído. 
• Mantener una buena higiene en los oídos. 
• Acudir a un profesional ante los primeros síntomas de pérdida auditiva.

3. Comunicarse con personas mayores con déficit auditivo

Hablar con una persona que padece hipoacusia puede crear un momento incómodo para cualquiera de los interlocutores. Por un lado, la persona que sufre de pérdida de audición puede sentirse aislada o incomunicada, y la persona que trata de comunicarse con él puede sentirse frustrado. 

La comunicación con personas con hipoacusia no debe generar malentendidos ni problemas para aquellos que la padecen. Además, la edad puede hacer que la hipoacusia en el adulto mayor sea más compleja. Es por ello, que es muy importante tener paciencia, así como tener en cuenta las siguientes consideraciones:

• Sitúate en un lugar con una buena iluminación, para que la persona mayor pueda ver tu rostro con facilidad. 
• Habla claro, despacio y vocalizando.
• No exageres ni distorsiones los movimientos, ya que puede despistar al anciano con pérdida auditiva. 
• Apoya tu comunicación oral con gestos.
• No te cubras la boca, no mastiques y evita las acciones que dificulten la locución y vocalización.
• En una conversación, es muy importante hablar de forma organizada: de uno en uno y respetando los turnos de palabra.
• Evita los ruidos de fondo, así como las altas frecuencias de sonido.
• Usa tu nombre para que se dé por aludido en la conversación. 
• Si la persona afectada de hipoacusia no entiende las palabras, es necesario repetirlo más veces o intentar probar con otras palabras. 
• Llama la atención del mayor poniéndole una mano en el hombro en caso de que no se de cuenta de que le están hablando.
• Es muy importante ser comprensivo y empático.
• Si el anciano usa audífono, asegúrate de que funciona y está cargado correctamente.
• En caso de que no use audífonos, es recomendable buscar el audífono adecuado para el mayor. 
• Ayúdale a encontrar las posibles ayudas y subvenciones para audífonos. Si requiere de uno puede solicitar las diferentes ayudas que existen. 

Un mal cuidado de la hipoacusia puede relacionarse con la aparición de la demencia. Es muy importante ayudar a los mayores que sufren esta patología a que se sientan incluidos. Esto evitará que los mayores se sientan aislados, mejorando además su calidad de vida.

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