¿Por qué escucho pitidos y ruidos en mis audífonos?

La última actualización se ha realizado el 08/08/2022. El artículo ha sido revisado por Paz García Amosa.

¿Escuchas un constante y molesto ruido cuando te pones los audífonos? ¿Ves que pasa el tiempo y la situación no mejora? 

La mayoría de las personas describen este ruido que escuchan al ponerse los audífonos como pitidos o silbidos. A esto se le conoce como retroalimentación o feedback.

En este artículo te contamos de qué se trata, cuáles pueden ser las causas y qué puedes hacer para acabar con el pitido de los audífonos.

1. Retroalimentación de los audífonos

El feedback o retroalimentación acústica es el nombre que se le da a ese pitido o silbido que escuchan los usuarios de audífonos en ciertas ocasiones cuando llevan puestos sus audífonos.

Este fenómeno es el mismo que se produce cuando una persona que habla a través de un micrófono se acerca demasiado al amplificador.

El feedback sucede cuando el sonido, ya amplificado por los audífonos, entra de nuevo al micrófono, haciendo que el sistema lo vuelva a amplificar y se genere ese ruido desagradable.

Esta retroalimentación afecta negativamente el proceso de adaptación de los usuarios. Esta es una de las principales razones por las que algunos deciden dejar de lado los dispositivos.

A pesar de que hoy en día muchas marcas de audífonos ofrecen modelos cuyas funciones incluyen la cancelación del feedback, de igual forma puede llegar a producirse, ya que no elimina los pitidos al 100%.

Por otro lado, el desarrollo tecnológico en el sector de la audiología ha dado como resultado la creación de programas de audífonos que ofrecen un test de que el audiólogo puede realizar para identificar el trayecto de la retroalimentación y sus posibles causas.

2. ¿Cuáles son las causas que lo originan?

El feedback de los audífonos se puede producir por distintas causas, entre las más comunes:

2.1. Elección incorrecta del tipo de audífono

Es importante que el audífono sea el indicado para satisfacer las necesidades auditivas de cada usuario, dependiendo del tipo o grado de pérdida que tenga. En caso contrario, la pérdida de audición no mejorará y tendrá una serie de incomodidades, entre ellas el feedback.

2.2. Volumen excesivo

Ajustar innecesariamente el volumen de los audífonos al máximo muchas veces es contraproducente. Una amplificación excesiva puede obligar al sonido a entrar nuevamente al micrófono, haciendo que sea reamplificado y se produzca el molesto pitido. 

2.3. Problemas técnicos o daños del audífono

Si el dispositivo es defectuoso, o alguno de sus componentes tiene algún fallo por daños, existe la posibilidad de que el usuario sea víctima constante de la retroalimentación acústica. Por eso, es importante acudir a un centro audiológico donde un audioprotesista pueda evaluar la situación.

Entre los defectos internos más habituales que pueden presentar los audífonos, nos encontramos con el desplazamiento del micrófono, las grietas o roturas en el tubo de conexión, codo o molde, el acortamiento del cable, debilidades en la unión entre el tubo de conexión y el molde, entre otras.

2.4. Ajuste inadecuado

Un mal sellado del molde por desajuste, desplazamiento o cambios en la forma y tamaño tanto del canal auditivo puede ser otra de las causas del problema.

2.5. Cerumen en el oído

El cerumen excesivo o los tapones de cera pueden bloquear el paso del sonido hacia el canal auditivo, haciendo que se devuelva al micrófono y produzca el feedback.

Para no llegar a este punto, es importante que un profesional revise los oídos y evitar limpiarlos con métodos poco recomendables como los bastoncillos de algodón.

2.6. Impresión equivocada del canal auditivo

De una correcta toma de impresión del canal auditivo depende el ajuste de la carcasa o molde del audífono. En los casos en los que la impresión no ha sido tomada de forma correcta, el usuario escuchará ruidos de forma constante.

2.7. Movimientos mandibulares

En algunos casos, los movimientos de la articulación temporomandibular ya sea para hablar, comer o bostezar pueden hacer que el molde se desplace y crear así una fuga acústica.

2.8. Mala colocación del audífono

El posicionamiento incorrecto de los audífonos también puede generar feedback. Es importante estar seguros de que el audífono se encuentra bien colocado y ajustado.

2.9. Situaciones cotidianas

Cuando el usuario arregla su cabello, se coloca un gorro, una bufanda, tiene contacto con alguien a través de un abrazo – por ejemplo – o se ubica en un lugar que rebota el sonido, está propenso a sentir el chillido en sus audífonos.

3. ¿Qué hacer si percibes feedback?

• Prueba el audífono en diferentes entornos. Esto te ayudará a saber si el feedback se produce en situaciones específicas o si ocurre en situaciones constantes.
  
• Si te encuentras en el periodo de adaptación, y tienes la oportunidad de hablar con otras personas que han pasado por esta situación, hazle todas las preguntas que te surjan.
  
• Asegúrate de cumplir con una correcta limpieza y mantenimiento de los audífonos.