Guía: cómo prevenir la pérdida auditiva

La última actualización se ha realizado el 13/06/2022. El artículo ha sido revisado por Julio Gómez Relinque.

La pérdida auditiva se puede presentar de forma gradual o congénita: se detecta como la dificultad para recibir e interpretar el sonido del entorno.

La exposición constante al ruido, la contaminación acústica, infecciones o la ingesta de ciertos medicamentos, son algunas de sus causas de aparición. Por suerte, todos estos factores de riesgo pueden prevenirse.

Para que puedas cuidar de tu salud auditiva de forma adecuada, hemos preparado esta guía completa con las pautas clave y recomendaciones de audiólogos que pueden evitar la aparición de la sordera.

1. Factores de riesgo que afectan al oído

La dificultad para comprender palabras e interpretar el sonido, ya sea de la televisión o en una conversación, suelen ser los primeros indicativos de la aparición de la sordera.

Hay varias razones por las que nuestro sistema auditivo puede no estar funcionando correctamente.

Las causas más comunes de la pérdida auditiva son el deterioro de las células del oído, defectos congénitos y factores de riesgo externos.

No todas las vías de aparición pueden evitarse, pero sí la gran mayoría. Por eso, cuidar la salud auditiva de forma periódica y constante resulta crucial.

Entre las patologías del oído más comunes se encuentran:

• Hipoacusia.
• Tinnitus.
• Otosclerosis.
• Enfermedad de Ménière
• Perforación timpánica.
• Patologías que pueden provocar pérdida de audición, como el síndrome de Ramsay Hunt o el hipotiroidismo.

La mayoría de los tipos de pérdida auditiva son irreversibles. Sin embargo, evitando los principales factores de riesgo podemos retrasar, evitar o incluso prevenir la hipoacusia.

1. 1. Prevenir la sordera en la infancia

Según la OMS, aproximadamente el 60% de las causas de la sordera infantil pueden prevenirse tomando las medidas adecuadas. Las principales patologías relacionadas con la hipoacusia en niños son:

• Sarampión.
• Parotiditis.
• Rubéola.
• Meningitis.

Los efectos perjudiciales de estas afecciones pueden minimizarse mediante la vacunación y prácticas de higiene; no obstante, también podemos tomar medidas de acción ante el diagnóstico de hipoacusia en nuestro hijo.

Por otro lado, las complicaciones que pueden surgir durante el parto también pueden desembocar en una pérdida auditiva prelocutiva; es decir, diagnosticada en los meses posteriores al nacimiento.

1. 2. Prevenir la pérdida auditiva en jóvenes y adultos

Una de las principales causas de la hipoacusia neurosensorial es la exposición a ruidos fuertes, sobre todo en adolescentes y jóvenes adultos.

Para evitar la hipoacusia que puede provocar el ruido y la exposición constante a espacios multitudinarios, deben tomarse medidas preventivas para proteger posibles daños en el oído.

Entre estas medidas, las más importantes son:

• Controlar los dB a los que exponemos el oído durante periodos de tiempo prolongados.
• Utilizar tapones y protecciones auditivas en ambientes especialmente hostiles, como el lugar de trabajo.
• Leer siempre la posología y prescripción de los medicamentos, así como evitar automedicarse.
• Llevar un estilo de vida saludable, tanto en alimentación como en higiene.
• Revisar nuestra audición de forma periódica, en un centro auditivo especializado.

2. ¿Por qué es importante cuidar tus oídos?

Es importante incidir en crear desde pequeños, hábitos saludables para prevenir enfermedades relacionadas con la pérdida auditiva y a su vez, se produzca un buen desarrollo del sistema auditivo. 

Cuando ya ha sido diagnosticada algún tipo y grado de pérdida auditiva o patología relacionada, las prótesis auditivas son la solución que podrá ayudarnos a mejorar nuestra calidad de vida.

Para conocer las medidas y métodos de prevención más funcionales para nuestro caso, debemos acudir al otorrino o al centro auditivo y evitar el agravamiento de los síntomas.

3. Claves para cuidar de tu salud auditiva

Te explicamos cuáles son las principales claves para cuidar de tu salud auditiva y evitar que aparezcan daños en el sistema auditivo.

3. 1. Controla el volumen de tus auriculares

Según la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORL-CCC), las personas entre 12 y 35 años se exponen de manera continua a niveles de ruido excesivos y perjudiciales para la audición.

El uso de auriculares para todo tipo de situaciones es el riesgo de pérdida auditiva más común.

Estas son las principales pautas a seguir durante el uso de auriculares que nos ayudarán a disfrutar del sonido sin dañar nuestra audición:

• Realizar descansos cada 10 minutos si la exposición ha sido elevada.
• Si la intensidad de sonido aumenta cada 3dB, el tiempo de exposición al ruido debe de reducirse a la mitad. 
• Evitar los auriculares tipo intra, siendo los de correa o tipo casco los más aconsejables.

El oído es capaz de recibir un cierto nivel de dB que se encuentra en el espectro auditivo. Por encima y por debajo de este espectro, el sonido puede resultar muy dañino o incluso no ser percibido.

3. 2. Evita los malos hábitos

La alimentación influye en todos los aspectos de la salud.

Comer de forma saludable, la ingesta de vitaminas y micronutrientes, también reduce el riesgo de pérdida auditiva o enfermedades relacionadas.

Todos los minerales son importantes, especialmente los alimentos de origen vegetal como los cereales, hortalizas y frutos secos son los más recomendados para cuidar la salud auditiva. 

La vitamina C de la piña, por ejemplo, es uno de los alimentos más beneficiosos para la reparación de los tejidos internos del nervio auditivo.

Otros hábitos típicamente tóxicos, como el tabaco o el alcohol, también pueden dañar la audición a largo plazo.

3. 3. Cuida tu higiene auditiva

La limpieza auditiva es tan importante como cualquier otra forma de cuidado. Para realizarla de forma adecuada, debemos implementar algunos hábitos de higiene:

• Evitar que los oídos permanezcan húmedos por mucho tiempo.
• Secar los oídos mediante paños o toallas.
• Uso de sprays sanitarios.
• La extracción de cera debe ser realizada por un profesional, mediante dispositivos electrónicos. 

El sistema auditivo ya tiene su propia sistema de limpieza, por lo que debemos evitar prácticas muy populares pero absolutamente tóxicas, como el uso de bastoncillos o agua oxigenada para limpiar los oídos.

• El uso de bastoncillos puede provocar daños en el tímpano, heridas, infecciones o incluso otitis.
• Evitar la limpieza de oídos mediante el uso de velas, estas pueden provocar quemaduras en el oído.
• Evitar limpiar posibles tapones de cera con agua oxigenada.

Los tapones de cera pueden ser complicados y ser síntoma de patologías mayores. 

El audioprotesista es quien puede recomendarnos un tratamiento para la limpiar la acumulación de suciedad u otros agentes patógenos. Normalmente, será este especialista quien realice la limpieza adecuada a través de herramientas especializadas.

3. 4. Revisa tu audición de forma periódica

Existan o no síntomas de pérdida auditiva, realizar de forma frecuente revisiones periódicas en el centro especializado es la mejor solución para evitar su aparición y detección cuanto antes.

Actuar a tiempo es la principal clave para evitar el agravamiento de los síntomas y de cualquier otra patología que pueda relacionarse.

4. La pérdida auditiva como enfermedad laboral: pautas de prevención

La pérdida de audición inducida por el ruido es la enfermedad profesional más común en Europa, especialmente en los sectores de la construcción, la industria y, sobre todo, en el sector del transporte aéreo.

Para prevenir su aparición, muchas empresas han puesto en marcha programas de control y prevención que contribuyen de forma notable al cuidado de la salud integral.

• Los trabajadores pueden someterse a pruebas auditivas anuales, en caso de solicitarlo. 
• Ante los primeros síntomas de hipoacusia, el trabajador puede solicitar una revisión auditiva cada 6 meses.
• Dependiendo del sector profesional, el trabajador puede realizar una revisión auditiva cada 3 meses, cuyo coste por supuesto está cubierto por la empresa.

Si el trabajador ya cuenta con un diagnóstico de pérdida auditiva, sus síntomas pueden corregirse mediante un diagnóstico precoz y el tratamiento recomendado por el especialista.

Las soluciones auditivas recomendadas para la corrección de la hipoacusia son los implantes óseos y en la cóclea, y el uso de audífonos.

5. El umbral auditivo: cómo funciona la audición

El oído humano tiene diferentes niveles para medir y captar el sonido: decibelios (dB), que indica el volumen y en Hertz (Hz) los cuales indican la frecuencia o vibraciones por minuto.

El nivel mínimo se sitúa desde los 20 dB hasta niveles máximos de 120-140 dB, a partir de los cuales podría percibirse como una fuerte sensación de dolor en el oído.

• Los sonidos que se encuentren entre los 20 y 70 dB son considerados sonidos normales, no molestos: tráfico, conversaciones con personas, secadores de pelo…

• Los sonidos que se encuentran entre los 80 y 85 dB son considerados más elevados de lo normal: ladridos de perro, sonido del metro, claxon, escuchar música con auriculares…

• Los sonidos que rondan los 90 y 100 dB son elevados y tienen riesgo: conciertos de rock, fuegos artificiales…

• Los sonidos que se encuentran entre los 110 dB y 140 son dolorosos y altamente perjudiciales.

A continuación te mostramos los diferentes umbrales auditivos unidos al tiempo de exposición recomendado.

Umbral auditivo recomendable

Nivel de dB soportables por el oído	Tiempo límite soportable por el oído.
80 dB	8h al día.
86 dB	2h al día.
92 dB	30 minutos al día.
95 dB	15 minutos al día.
101 dB	4 minutos al día.
107 dB	1 minuto al día.
De 110 a 120 dB	Tan solo unos segundos pueden provocar efectos muy dañinos.

6. Cómo actuar ante los primeros síntomas de hipoacusia

Si detectamos que nuestra audición empieza a caer en detraimiento, debemos acudir a un centro auditivo de forma urgente. El audioprotesista podrá recomendarnos diferentes tipos de soluciones auditivas que podrán adaptarse a nuestro grado y tipo de hipoacusia.

Las diferentes soluciones que pueden prescribirse son:

• Tratamiento farmacológico, como corticoides. Recomendados cuando se detecta una pérdida temporal sin causa aparente.
• Implantes cocleares, normalmente utilizados en casos de sordera profunda.
• Audífonos: la solución más cómoda y recomendada para la mayoría de tipos y grados de pérdida auditiva.

Las prótesis auditivas externas son la solución más recomendada en la mayoría de tipos y grados de hipoacusia, pues se trata de una solución poco invasiva y adaptable.

No obstante, solo en un centro especializado podrán darnos un diagnóstico a medida que nos ayude a escoger el tratamiento que más puede adaptarse a nuestras necesidades y estilo de vida.

Preguntas frecuentes sobre la prevención de la sordera

> ¿Cómo se calcula la pérdida auditiva? 

Una audiometría tonal llevada a cabo en un centro auditivo es la prueba que permite calcular la pérdida auditiva y el umbral de nuestra sensibilidad auditiva.

> ¿Cómo se cura la sordera?

A día de hoy, no existen tratamientos que puedan curar ni restaurar la pérdida auditiva; sin embargo, existen diferentes soluciones para corregirla, como el uso de audífonos o implantes cocleares.

> ¿Por qué se produce la sordera?

Pueden existir diferentes causas o desencadenantes que provoquen la pérdida de audición. Depende, principalmente, del estilo de vida como o de condicionantes genéticos.